Eskorbuto
En el fondo, ningún grupo como Eskorbuto supo decir ni tan alto ni tan claro que era ser un chaval de clase obrera en la vorágine de destrucción del tejido industrial y social de principios de los 80, condenado a la marginación social y con un presente y futuro completamente negros donde el único color era el blanco que llegó con la explosión de la heroína, que acabaría con Iosu Expósito y con la formación mítica del grupo en 1992. Detrás quedaron auténticos himnos del punk vasco y estatal, el que probablemente sea el disco de punk más influyente que se haya parido por aquí, "Anti-todo" (Discos Suicidas, 96), y una leyenda que sigue viva en muchos grupos y en muchas paredes.