¿Alguien recuerda aquel artículo que en su día publicó la ya finiquitada revista Rolling Stone española y en el que una profesora de canto examinaba las capacidades de una serie de cantantes pop de nuestro país? Pocos títeres dejó con cabeza aquella suerte de Risto Mejide del bel canto que desde la más estricta ortodoxia ignoraba la expresividad o emoción de determinadas voces e invitaba al personal a abandonar su carrera de cantante. Para los que todavía arrastren aquella rémora o pretendan curarse en salud (no vaya a ser que a algún otro medio tenga la ocurrencia de repetir la experiencia) ahora se publica “Guía práctica para cantar” dentro de la colección Taller de música.
Obviamente este manual de casi 200 páginas elaborado por la coach vocal Isabel Villagar está esencialmente destinado a aquellos alumnos que están introduciéndose en el terreno del canto clásico, aunque desde la introducción se deja claro que su utilidad puede extenderse a la música popular o “moderna”, porque su principal vocación es que el lector aprenda a conocer su propio aparato fonador y a partir de ahí desarrolle sus capacidades. Para eso la estructura del libro se compone de una primera parte en la que precisamente de los aspectos físicos y fisiológicos, antes de entrar en materia con una serie de ejercicios (135 en total) y concluir con una tercera parte en la que se la autora se adentra en otro tipo de consejos de corte más profesional (desde el auto-marketing hasta la gestión económica.
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