La M.O.D.A., diario de grabación
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La M.O.D.A., diario de grabación

Redacción — 26-02-2015
Fotografía — Virgina Rota y SIlvia Grav

Así se confeccionó "La primavera del invierno"

Capítulo 1. Nubes negras

Es domingo por la noche y acabamos de llegar a Gárate Estudios (Andoain), el lugar donde vamos a grabar nuestro segundo LP. El estudio está en un caserío en medio del monte, rodeado de prados y bosque, aunque ahora no veamos nada más que la sombra y el frío de enero. Ayer salimos temprano de Burgos con destino St. Feliu de Guixols (Girona) para recoger al que va a ser el productor, Santi García (Standstill, The New Raemon, Toundra) y cargar la furgo con buena parte del equipo que tiene en su estudio (Ultramarinos Costa Brava). Aunque en realidad, este viaje comenzó hace casi un año, en febrero de 2014.
 


Capítulo 2. Miles Davis

Entonces nos dimos cuenta de que estábamos escribiendo un disco nuevo. No era lo más recomendable en ese momento, con una gira de 75 fechas por delante, pero nos salió así. Y fue esa necesidad de expresarnos, de seguir adelante, la que hizo que durante casi doce meses pudiésemos compaginar las actuaciones de los fines de semana con ensayos interminables para componer entre semana.
Los primeros pasos en el proceso de composición son probablemente los más difíciles. Se avanza despacio, casi a ciegas. Es extraño e incluso contradictorio: dudas de todo lo que haces pero al mismo tiempo es como si, en tu interior, tuvieras la certeza de que estás haciendo algo que realmente vale la pena. En esa primera fase trabajamos mucho con Diego Galaz (Mastretta, Fetén fetén), quien ya produjo nuestro primer álbum y vuelve a jugar un papel destacado en éste. Encerrados en el local, dimos mil vueltas a las ideas que teníamos, probando, cambiando, añadiendo o quitando, hasta que acabamos con 10 canciones en las que creemos a muerte.
 


Capítulo 3. Amanecederos

Sale el sol en Gárate. Es temprano y el lunes acaba de empezar. En seguida llega Kaki Arkarazo, el ingeniero de sonido del estudio. Además de ser un lugar con una sala de grabación increíble y un equipo de primer nivel, aquí nos sentimos cómodos, cerca de casa. Por eso hemos decidido repetir experiencia después de lo vivido con nuestro primer álbum, "¿Quién nos va a salvar?" (2013). No han pasado ni dos años desde entonces, aunque todos tenemos la sensación de que fue hace mucho. Tantos kilómetros, conciertos y ensayos juntos han conseguido que el grupo esté más unido que nunca. Santi quiere que eso se traslade al sonido del disco. Llega el momento de empezar por las bases: batería y bajo.
 


Capítulo 4. PRMVR

Los primeros días transcurren como habíamos previsto, lo cual no deja de ser sorprendente. Ya tenemos grabadas las baterías, los bajos y las guitarras acústicas básicas. Hemos utilizado diferentes combinaciones de micrófonos, amplificadores e instrumentos en función de lo que buscábamos en cada canción. Para las baterías hemos usado una Ludwig antigua y la C&C del hermano de Santi, Víctor García. Para los bajos, la combinación ganadora de Jazzbass + Ampeg ha añadido mucha pegada a la base rítmica. A la hora de grabar acústicas, Santi ha querido pasar la señal un amplificador Fender Hot Rod deluxe, lo que nos va a permitir jugar con sonidos de guitarra que hasta ahora nunca habíamos incorporado.
 


Capítulo 5. Disolutos

Estamos a jueves y nos acercamos al ecuador de la grabación. Acaba de llegar Kike Arza, que va a grabar contrabajo en un tema. Una vez ha terminado, empezamos con el acordeón, uno de los instrumentos más característicos del sonido del grupo. Las canciones empiezan a coger forma y nos motivamos. Comenzamos con las voces y nos dan las tantas sin enterarnos. Santi propone coros y dobles voces que nos ponen la carne de gallina. Entre el jueves y el viernes acabamos con toda la parte vocal y llega el momento de descansar un par de días. La próxima semana habrá bastante movimiento. Aún hay muchos instrumentos y detalles por registrar: mandolinas, banjos, teclados, cuerdas, vientos... y alguna colaboración que nos hace especial ilusión.



Capítulo 6. Hay un fuego

Mientras estábamos componiendo el disco, teníamos claro lo que buscábamos: no repetir la fórmula del anterior pero al mismo tiempo no perder los elementos que nos caracterizan y nos han hecho más o menos reconocibles para el público. Y eso, como hemos podido comprobar, no es sencillo. Somos de los que creemos que todo banda debe exigirse a sí misma tomar ciertos riesgos, salirse de su zona de comodidad y probar, hasta donde considere. Así que hemos intentado no decir lo que ya habíamos dicho, tanto en la música como en los textos.
El título del disco está inspirado en la novela "Primavera con una esquina rota" de Benedetti y simboliza, a través de las dos estaciones, los momentos buenos y malos en la vida de cualquier persona. Las letras hablan de pensamientos y sentimientos de alguien que está cada vez más cerca de eso que llamamos “edad adulta” y más alejado de la niñez. Del día a día, de aprender a sobrevivir, a encajar los golpes y aceptar la pérdida, y de cómo lo malo nos enseña a agarrarnos a lo bueno. Nunca hemos pensado en hacer un disco conceptual o forzar las letras en una dirección concreta, pero una vez estuvieron terminadas, sí nos dimos cuenta de que detrás del título y el contenido del disco había un mensaje compartido: hasta en los peores momentos hay esperanza. No en el sentido de falso optimismo o bienestar. Al revés. Al ser conscientes de lo que pasa a nuestro alrededor, ese mensaje cobra aún más valor para nosotros.



Capítulo 7. Flores del mal

Después de desconectar durante el fin de semana, es lunes otra vez y encaramos la segunda mitad de la grabación. Intentamos disfrutar mientras Santi y Kaki se encargan de microfonear cada instrumento: banjos de 4 y 5 cuerdas, mandolinas y más acústicas. Diego Galaz ha escrito unos arreglos de cuerda que nos dejan flipados y antes de que nos demos cuenta las canciones han dado un paso de gigante. A pesar de todo, la presión por intentar que todo quede como tenemos en la cabeza sigue ahí y eso evita que nos relajemos.
 


Capítulo 8. Los lobos

Acaban de llegar Jacobo y Álvar para grabar teclados y saxofón. Al final acaban haciendo mil cosas, entre percusión, coros y demás. Jaco graba también una Gibson de 12 cuerdas que tiene más años que todos los del grupo juntos. Así suena. Después de comer, para el café, llega Gorka Urbizu (Berri Txarrak). Va a cantar en una canción y no podemos estar más ilusionados. Algunos del grupo aún nos acordamos de cuando fuimos a verles tocar a Bilbao hace ya diez años, durmiendo entre la estación de bus y el metro, haciendo tiempo para coger el bus de vuelta a Burgos. Por eso valoramos todavía más que Gorka haya querido participar en el disco, no sólo cantando sino escribiendo su parte de la letra. No hay palabras.
Hay otra voz invitada, María Rodés. Canta (esta vez no es copla) en "Hay un fuego". Nos flipa su voz y para nosotros es muy atractivo el hecho de que a la gente le sorprenda tanto que se den colaboraciones entre músicos que sobre el papel practican estilos diferentes.



Capítulo 9. Catedrales

Ya casi vemos el final del túnel. Nos quedan dos días y toca recibir la visita de varios músicos que van a participar en este álbum. Ager Isunza, del grupo Audience, toca el pedal steel en dos canciones. Pello Ramírez graba violonchelo y un acordeón precioso en el tema que cierra el álbum. Tras ellos llega la sección de vientos, Javi Perez (trompeta), Julen Izarra (saxofón) y Juanan Diez (trombón), que graban arreglos en varios temas. Nos sentimos agradecidos por poder contar con gente tan maja en nuestro disco. Cuando estás en un grupo uno aprende a valorar ciertas cosas que van más allá de la habilidad o la técnica musical, y una de las mejores cosas de estar en esto es poder conocer a personas que de otra forma nunca te hubieras cruzado. Definitivamente, uno de los puntos álgidos de la grabación ha sido cuando nos hemos juntado todos al terminar charlando delante de unas cervezas.
 


Capítulo 10. Rascacielos

Es viernes y hemos terminado. Nos sobra un día, aunque en realidad el margen viene genial para ordenar y dejarlo todo listo para que Santi pueda llevarse las pistas a su estudio. Por delante, una semana de mezcla en St.Feliu de Guixols. De ahí, el disco pasará a las manos de Víctor, que lo masterizará en Ultramarinos Mastering. La portada y el diseño están casi terminados. Las fotos de promo también. Hemos aprovechado el entorno y el estudio para hacerlas en los descansos de la grabación. Así tendremos siempre un recuerdo de lo que han sido estas dos semanas.
Estamos más satisfechos que nunca, orgullosos de lo que hemos hecho. Ahora solo falta salir a la carretera y tocar. Defenderlo delante de cualquier público y disfrutar de lo que venga.

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